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Año 15. No.796. del 26 abril al 02 mayo 2021
Premio de Comunicación Alternativa

Argumentan la parálisis económica por medidas anti COVID-19

REDUCEN 25% DEL SALARIO EN 635 MIL EMPRESAS

*La precariedad laboral se expande a 8 de cada 10 trabajadores.

*Afecta desde trabajadores con estudios básicos y hasta con estudios superiores.

 

Participación del Doctor en Economía David Lozano,

Investigador y profesor de la Facultad de Economía y Coordinador

del Centro de Análisis Multidisciplinario de la

Universidad Nacional Autónoma de México (CAM-UNAM),

en el programa del 24 de abril de 2021,

Transcripción de Antonio Peregrino Rojo, colaborador voluntario

Publicación Original del Portal www.frecuencialaboral.com

La precariedad laboral en México afecta a 8 de cada 10 trabajadores sin estudios y hasta con niveles de educación superior, lo cual empeoró por la decisión de 635 mil empresas de reducir en 25% el salario de sus trabajadores, debido a las medidas sanitarias anti COVID-19.

Hay miles de profesionistas con doctorado o maestría ganan menos de un salario mínimo dando clases por asignatura, sin empleo formal ni prestaciones sociales ni derecho a una pensión o que son médicos especializados con contratos eventuales y jornadas laborales de más de 12 horas diarias, denunció el Doctor en Economía David Lozano, coordinador del Centro de Análisis Multidisciplinario de la Universidad Nacional Autónoma de México (CAM-UNAM).

Además hay paros en todas las escuelas y facultades de la UNAM por falta de pagos y la sobrexplotación laboral creció en todos los ámbitos mediante la imposición del teletrabajo.

A eso se suma la decisión del gobierno de que las pensiones y jubilaciones se paguen en UMAs, lo cual reduce 42 por ciento el pago, lo cual contribuyó al aumento de la precariedad laboral.

A continuación la versión textual de su exposición en el programa de radio Frecuencia Laboral:

"Nosotros hemos estado haciendo investigaciones sobre la subcontratación, conocida como outsourcing, y la precariedad laboral. Presidencia de la Repúblico informó que analizarían ambos temas, pero esto no lo causo la pandemia de COVID-19, sino que se debe a los bajos salarios y al empleo eventual de la mayoría de los trabajadores.

También tenemos problemas en el caso de las pensiones y jubilaciones, porque hay trabajadores que tienen más de 30 años laborando y no tendrán el derecho a una pensión por vejez y cesantía en edad avanzada.

En el sector universitario tenemos que el 74 por ciento de los profesores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) son de asignatura o sea que se les paga por clase asignada. El 13 por ciento son investigadores, técnicos y académicos el 8 por ciento y el resto son contratados eventualmente.

El problema de la subcontratación en las universidades como la Nicolaita de Michoacán, la veracruzana, de Nuevo León y la Universidad de Guadalajara, es que el 80 por ciento de los profesores ganan por clase la pequeña cantidad de entre 89 y 125 pesos.

El CAM-UNAM ha hecho el cálculo de que el promedio de ingreso de estos profesores es de 3 mil 400 pesos al mes, menos de un salario mínimo, a pesar de que tienen estudios superiores con educación universitaria y todavía de ahí se les restan sus aportaciones al Instituto de Seguridad y Servicios Sociales para los Trabajadores del Estado (ISSSTE) e impuestos.

Hace más de 40 años no se había visto que hay paros en todas las escuelas y facultades de la UNAM por falta de pagos.

Este mismo panorama están sufriendo los trabajadores de la salud, cerca del 72 por ciento de trabajadores del sector de la salud tienen exactamente los mismos problemas que los trabajadores de las universidades. Es decir, son profesionistas, tienen títulos de licenciatura, maestría y doctorado y su plaza es eventual con pagos inferiores al personal administrativo de confianza.

Por ejemplo un maestro de asignatura que da 20 horas de clase a la semana gana de 18 a 20 mil pesos al mes, atendiendo a 600 alumnos. En cambio un director gana 80 mil pesos al mes, más lo que se le pague por su plaza de profesor, es decir gana alrededor de 120 y 130 mil pesos, llegan a ganar más que el presidente de la República.

Un profesor de educación básica debe tener más o menos un salario de 8 a 10 mil pesos al mes, pero su ingreso debería ser de entre 15 mil y 20 mil pesos al mes, para que fuera suficiente por el trabajo que realiza.

Ahora tenemos un problema mayor, porque 635 mil empresas redujeron en 25% el salario de los trabajadores con el pretexto de la pandemia por COVID-19, pues argumentan que no hay actividades por las medidas sanitarias que se adoptaron.

También hay un problema por la sobexplotación mediante el teletrabajo, porque para la mayoría de quienes laboran bajo ese sistema aumentaron las horas de trabajo, pero el presidente de la República dijo que no es responsabilidad del gobierno que aumenten el pago por la mayor carga de trabajo, a pesar de que es el patrón de cientos de miles de personas se encuentran operando en esa modalidad.

La mayoría de empleados mediante teletrabajo laboran 4 horas más que antes y el pago no corresponde a eso.

El problema de la precariedad laboral ha aumentado y a eso se suma la decisión del gobierno de que las pensiones y jubilaciones se paguen en UMAs, lo cual reduce 42 por ciento el pago.

De acuerdo a la Organización Mundial del Trabajo en México hay 23 millones de personas que laboran en condiciones de precariedad laboral, peses a que están registradas como empleados formales."

 

 

 

 

 

 
   
 
 

 

 

 

 
 
 
 
 
Año 15. No.796. del 26 abril al 02 mayo 2021
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